El útero es mucho más que un órgano físico: es
el centro de nuestra energía creativa, del placer
y de la fuerza vital.
En él se guardan memorias de dolor, miedo,
abuso, pérdidas y silencios heredados.

Sanarlo es liberar esas memorias y volver a
conectar con tu fuerza, vitalidad y energía
creadora.

Vivimos en una sociedad que nos ha enseñado a
vivir desde la mente y el hacer, desconectándonos
del cuerpo y de su sabiduría.

Nuestros úteros han quedado reprimidos y cargados,
pero ahora es momento de despertar la energía
femenina y recordar el poder del placer, la
intuición y la creación que viven en nosotras.